Los empleados deben ser considerados el recurso más valioso dentro de la empresa y los administradores deben invertir en ellos, proporcionándoles continuamente oportunidades para mejorar sus habilidades. Esto se conoce como desarrollo de personal e incluye aquellas actividades designadas a capacitar y motivar al empleado para ampliar sus responsabilidades dentro de la organización.
La capacitación hará que el trabajador sea más competente y hábil. Desarrollar las capacidades del trabajador, brinda beneficios para los empleados y para la organización. Ayuda a los trabajadores aumentando sus habilidades y cualidades y beneficia a la organización incrementando las habilidades del personal de una manera costo-efectivo. Generalmente, es más costoso contratar y capacitar nuevo personal, aun cuando éste tenga los requisitos para la nueva posición, que desarrollar las habilidades del personal existente. Asimismo, al utilizar y desarrollar las habilidades del trabajador, la organización entera se vuelve más fuerte, productiva y rentable.
Utilizar las técnicas por separado, no asegura que el personal esté motivado para participar en actividades para su propio desarrollo. Una organización debe dar entonces incentivos a los empleados ofreciendo oportunidades de promoción y transferencias para complementar las habilidades del empleado en el trabajo y utilizarlas en su máximo potencial.
En el Departamento de Recursos Humanos, los administradores deben considerar que el personal talentoso puede abandonar la organización aunque su salario sea adecuado. El trabajador generalmente necesita nuevos desafíos que lo estimulen y mantengan satisfecho con su trabajo. Es responsabilidad del administrador reconocer el potencial de los trabajadores y ofrecerles nuevas oportunidades.
En la gráfica podemos ubicar la posición del Departamento de Personal en una Empresa que tiene plenamente planteada la función de la Administración de Recursos Humanos.
El poder del consumidor: Una fuerza transformadora en el mercado actual
En un mundo donde la información fluye a velocidades sin precedentes y las opciones de consumo se multiplican exponencialmente, el poder del consumidor se ha