🍃 Origen de la Fitoterapia
La fitoterapia es uno de los elementos constitutivos de las medicinas tradicionales y ancestrales. Tiene sus orígenes en la farmacopea china y la farmacopea india (Ayurveda). El uso de plantas para curar enfermedades también se menciona en textos sumerios que datan del tercer milenio antes de Cristo.
🍃 Principio de la Medicina Herbaria
La fitoterapia se basa en el uso de plantas medicinales con fines terapéuticos. En la medicina clásica, los fabricantes de productos farmacéuticos extraen el ingrediente activo de las plantas para fabricar medicamentos. En la medicina herbal, la planta se usa en parte o en su totalidad, en varias formas.
La lógica del tratamiento también es diferente entre la medicina clásica y la medicina herbal. La medicina moderna es sustitutiva, es decir, los medicamentos convencionales regulan las funciones del cuerpo y lo liberan de la necesidad de curarse a sí mismo. En la fitoterapia, las plantas también se utilizan como medicinas para regular las funciones corporales, pero también ayudan al cuerpo humano a curarse a sí mismo.
Según los herbolarios, una enfermedad no ocurre por casualidad, es la consecuencia de un desequilibrio interno en el cuerpo que debe adaptarse constantemente a su entorno. La capacidad del organismo para mantener su equilibrio y adaptarse, que es única para cada uno de nosotros, constituye el terreno del individuo. La fitoterapia se centra en analizar los sistemas constitutivos del organismo: sistemas neuroendocrinos (función de regulador), hormonal, inmunológico, sistema de drenaje, para fortalecerlos si es necesario con la ayuda de las plantas.
🍃 ¿Por qué consultar a un especialista en fitoterapia?
La fitoterapia todavía se considera a menudo como una medicina sintomática y de drenaje. Contribuye a equilibrar todo el organismo a través de las plantas y por tanto actúa sobre todo tipo de enfermedades.
Por ejemplo, aquí hay algunas indicaciones comunes en la medicina herbal (lista no exhaustiva):
- Afecciones bronquiales y estado gripal: catarro, bronquitis, tos;
- Trastornos digestivos: espasmos, colitis;
- Trastornos dermatológicos leves: quemaduras solares , quemaduras superficiales, eritema, eczema;
- Insuficiencia venosa y linfática;
- Trastornos urinarios;
- Trastornos del sueño, estrés y ansiedad
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